Dos horas de...The Talos Principle

En esta sección os hablaré de las primeras impresiones que tengo con un juego al que ya le he dedicado dos horas de vicio bueno. Son impresiones basadas en poco tiempo de juego, pero es más que suficiente para poder hacer una valoración de posibilidades.

Me está encantando.



Es un juego que ha ido saliendo de mi lista de deseados en steam con extraña regularidad, para volver a entrar al poco tiempo; normalmente debido a que había leído alguna reseña o vuelto a ver algún video promocional.
The Talos Principle es un juego de puzzles en el que, ambientado en un entorno clásico, tienes que ir solucionando pequeños enigmas que se basan en la colocación de torretas protectoras. Algo muy simple pero cuya dificultad se va recrudeciendo poco a poco. Cuando resuelves uno de los puzzles te dan un sigil (lo podéis ver en la esquina superior izquierda de las imágenes) y con ellos vas abriendo puertas y desbloqueando nuevos mapas.
Básicamente lo que tienes que hacer es colocar diferentes torretas que aprisionan o liberan otras cosas: centinelas guardianes que si te ven explotan, ametralladoras sujetas al techo que disparan si entras en su zona, lásers que impiden que pases y supongo que irán apareciendo más cosas. Tienes que utilizar el ingenio para irte moviendo por los diferentes escenarios sin acabar teniendo que rebobinar constantemente.



En teoría eres un hijo de un tal «Elohim», dios vaya, que te pone a prueba para que puedas heredar el mundo o cosas así. Rápidamente te das cuenta de que hay fallos de racord, que no mueres y que a veces el escenario o Mundo en el que estás, se desvanece ligeramente.
La voz de Elohim te va hablando de vez en cuando, prometiéndote el gobierno de la Tierra y a la vez advirtiéndote de que no vayas a la torre. Torre a la cual quieres ir inmediatamente, como es obvio.
Junto con los archivos que documentan la trama, el toque clásico tanto histórico como visual y filosófico, me está pareciendo un juego de puzzles con una profundidad que no me esperaba.



No sé si el título del juego viene del gigante Talos, hecho de bronce que defendía Creta y que tiene varios arcos en algunos de los mitos más importantes de la griega clásica; o a Tales de Mileto, filósofo griego al que se le atribuye el primer intento de definir el origen de la vida (a través del agua y tal), así como otra serie de teorías geométricas y el ser maestro de Pitágoras. En cualquier caso, seguiré jugando con esto en mente y más adelante os comentaré qué tal. 

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