Endless Space 2

Voy a comentaros un poco de qué va este juego. Endless Space 2 es un juego de simulación en el que tienes que construir y evolucionar un imperio. La simplicidad de esa frase se vuelve extremadamente paradójica cuando has jugado cincuenta turnos de una partida y te das cuenta de que bien podrían decirte aquello de «no sabes nada Jon Nieve». No sé si a vosotros os molará o no pero este tipo de juegos generan un campo de fuerza a mi alrededor que consigue que el tiempo pase lentamente, que no te des cuenta de que llevas cuatro o cinco horas enganchado como una mala bestia mientras miras rangos de precios, posibles sistemas a colonizar o calculas cuánto rato tardarás en poder evolucionar más tus naves. Inmersión absoluta, tiempo ilimitado.

Las posibilidades de este tipo de juegos y concretamente de Endless Space 2 tienden a infinito y ya no hablemos de las posibilidades del modo online que ni quiero probarlo, directamente te tiene que explotar la maldita cabeza. Es complejo de explicar a alguien que nunca haya jugado a alguno parecido, aunque sea un Age of Empires, pero la complejidad a la que puedes llegar es absurda. Tienes muchísimos factores que puedes y debes tener en cuenta para desarrollar tu imperio y no todos son fáciles de preveer. Desde choques fronterizos que se acaban arreglando con un intercambio comercial hasta guerras directas con las que tienes que lidiar, pasando por eventos aleatorios que hacen tu vida un poco más difícil; el juego no para de darte cosas por las que te tienes que preocupar y normalmente el tiempo corre en tu contra.

Las facciones aportan unas variables muy interesantes, siendo la menor de ellas las pasivas con las que partes. Cada una tiene su propio estilo e incluso su forma de colonizar. Sinceramente, no considero que sea un experto y debo llevar como 50 horas jugadas, pero es que no he probado ni la mitad aún y ya lo estoy flipando. Hay una de cuyo nombre no logro acordarme que te obliga a colonizar los planetas después de haber extendido una especie de raíces siderales a ellos. Otra que tienes que robar los habitantes de otros mundos, otra cuyo avance tecnológico dejaría en calzconcillos a cualquiera de las super razas de Star Gate... una pasada vamos.

Es el segundo al que juego «en serio» y ha superado con creces al Endless Legend, cosa que veía complicada. La colonización de nuevos sistemas, la obtención de recursos y el sistema de confrontación diplomática me vuelven loco. Cada partida aprendo algo nuevo y eso hace que esté todo el tiempo pensando pero alejado de lo que el día a día te aporta. Si queréis echarle horas sin parar y olvidaros un poco de vuestros problemas mundanos, mi consejo es que no esperéis a una rebaja de Steam, dadle al comprar ahora que para mañana es tarde.

Nos vemos en el espacio.